Anoche, mientras me ponía el pijama para ir a dormir, me puse a pensar, ¿qué pasaría, si todas las personas del mundo se rieran sin un sentido?, ¿qué pasaría, si todas las personas del mundo, se quedaran callados definitivamente por 10 minutos?, ¿si todas las personas, diariamente, se vieran a los ojos con su pareja?, ¿quién reiría primero?, ¿qué pasaría después?, se darían un beso, darían un pequeño empujón, o se taparían la cara con las manos, y después de unos segundos, entre abrirían los dedos de las manos para ver que hace la otra, ¿te imaginas?, fuera un mundo de locos, o tal vez no, todos pensamos que sería un mundo de locos, porque la gente no está acostumbrada a despertare por las mañanas y decir buenos días a su pareja con una sonrisa, no, con una enorme sonrisa en el rostro, porque no estamos acostumbrados a que nos digan lo especial que somos, porque tal vez tu crush no te hace caso, pero lo que no sabes es que tal vez haiga otra persona que está atento o atenta a tus movimientos, sabe lo que te gusta, tu música favorita, sabe porque no te gusta esa comida, o porque no soportas el olor a perfumes fuertes, ¿por qué la gente es así?, porque en generaciones antiguas, solamente nos enseñaron a despertarnos, lavarnos la cara, desayunar, e ir al trabajo, pero no nos enseñaron a que tienes que verte en el espejo, por muy mal que allá empezado tu día, tienes que hablarte a ti mismo, tienes que decirte lo hermosa o guapo que eres, lo bien que hueles, tienes que decirte, que ese día mejorara, que esperes ansioso a las cosas por venir, porque lo que no esperas, ya te está esperando, porque ya es tulló y que todo tiene una gran recompensa, ¡ya se!, hoy te propongo algo, mañana que te levantes, lo primero que tienes que hacer, es doblar tu cama, y mientras lo haces, baila, baila mucho, como nunca lo has hecho, brinca, corre, salta en un mismo lugar, y si no puedes, grita, grita de lo feliz que eres, luego ve al baño, y mírate fijamente a los ojos, y dite lo que nunca te has dicho las cosas que jamás pensaste decir, pero a ti mismo, enamórate de ti, piensa en lo que quieres ser, en cómo quieres que te trate la gente, en lo alto que quieres llegar, luego date un baño, y disfruta cada gota de agua que recorre tu cuerpo, juega con el shampoo, hazte las típicas y más raras pelucas que jamás hallas echo, y si no puedes, hazte un bigote, ponte barba, o has un bikini, luego ponte una prenda de ropa que jamás pensaste utilizar, una que tenga colores, brillo, alegría y sabor, después di buenos días a todos, con una gran sonrisa en el rosto,  puedes agregar un beso, un salto, un baile, y si vives solo en un edificio, abre la ventana y grita, márcale a un ser querido y dile buenos días, dile cuanto lo quieres, y que todos los días piensas en él, aunque sea solo un segundo, que todo esto se haga un hábito en tu día a día, pero nunca olvides que no debes volverlo una costumbre, cámbiale el orden a las cosas, ponle sabor y brillo.