Y me lastimaste quise creer sin intensión, fuiste de esos amores esporádicos que sobrepasó mi capacidad para decir basta, es increíble como unas simples palabras pueden hacerte daño, palabras que forman una oración que se clava en tu piel como un puñal, soltaste esas palabras después de insistir que me dijeras que te pasaba, en ese momento mis ojos se cristalizaron, la verdad no sé como pero respire profundamente para que no me veas llorar, solo quería salir corriendo de ese lugar, pero mi orgullo me ayudo a quedarme y continuar, tonto orgullo que no sabe cuándo retirarse.
La noche terminó con un nudo en la garganta, de regreso a casa me quede mirando la ventana, mientras tu conducías, pensé en esas palabras y lo que me estaba lastimando, levante la mirada y te observé y por primera vez después de algunos meses, me fije en tu expresión perdida y lo entendí todo, no me necesitabas, no querías que me quede a tu lado, no habías pensado en un futuro junto a mí y entonces supe que tenía que hacer .
Me llevaste a casa y cuando me despedí lo hice con un fuerte abrazo que te sorprendió y mire tu rostro confundido, esa es la última vez que te vi, yo solo desaparecí, no me quise quedar en donde no me quisieran bonito, pues lo merezco, me quede con la duda, me hubiera gustado saber ¿que querías de mí?
