Imaginen como sería nuestra vida sin una sola mentira aceptando lo que somos, sin aparentar ser perfectos, dejarían de haber tantas peleas e injusticias también conoceríamos realmente a las personas con las que compartimos nuestra vida diaria.
Pero ¿Por qué decimos mentiras? Será por miedo a no ser aceptados con nuestros errores o para que nos quieran por algo que realmente no somos, considero que sería mucho mejor reír con otras personas sin tener que estar ocultando la verdad o pensando en que nos van a descubrir.
Para no tener que pasar por todo esto es necesario aprender a decir la verdad sin importar las consecuencias que esta nos puede traer, cuando estemos pensando en decir una mentira pensemos en todo lo que estamos arriesgado como nuestra credibilidad o el respeto de la persona a la cual le vamos a mentir. Porque sin importar cuanto tratemos de ocultar algo, la verdad siempre saldrá a la luz.
YO YA DECIDÍ DEJAR DE MENTIR ¿TÚ QUÉ ESPERAS PARA HACERLO?