Ojalá la vida te hubiera puesto en otro camino, que siguieras aún vivo, y si el no estar conmigo era tu destino, aceptaría caminar por otros caminos para que al final te hubiera podido ver vivo. Pero Dios decidió que caminarás por mi sendero, que al final se alargó para mi, pero tú te quedaste varado en aquel camino. Ojalá el viento, las flores o las voces me lo hubieran dicho, me hubieran advertido que no llegarías hasta el final conmigo. Ahora solo tú alma siento como camina conmigo y a veces las nubes me recuerdan a nosotros dos unidos, pero el viento es mi favorito, pues todos los días trae a tu fragancia conmigo. .