Estaba pensando en la muerte.
Estaba pensando en la muerte, en cómo una persona sin saberlo deja de existir. En cómo debe ser ese último momento, y más sabiendo que es el último .
Estaba pensando que morir me da miedo, que me aterra la inexistencia, que la nada me asusta. Que formas parte de algo y de repente no perteneces. ¿Y a qué perteneces entonces?
Estaba pensando que tengo mucha suerte por seguir viva. Que debo aprovechar mientras lo esté. Que tengo una buena vida con buenas personas y buenos recuerdos, y eso me hace afortunada.
Lo malo viene con la incertidumbre. No he perdido a nadie. ¿Qué será de mi cuando lo haga? ¿Qué sería de mí cuando te pierda? ¿Cómo seguiré adelante sabiendo que no volvería a tenerte?
¿Qué se siente al necesitar una persona a la que no puedes abrazar, a la que no puedes oler, a la que no puedes sentir? ¿Qué vacío es más grande, la muerte o la pérdida?
Estaba pensando en la muerte, y estaba pensando que me aterra.
Pero cuando se acerque la muerte, que me lleve a mí primero.