Miedo. O pánico que se acerca más a lo que siento.

No he sentido lo que sentí ese sábado en mucho tiempo .Cuando salí de allí, tuve ganas de confiar, de fluir, de ser con él. Y que miedo al día siguiente cuando el alcohol se esfumó y empecé a pensar. Cuando a las 10 de la mañana paso por delante y yo no sabía como reaccionar. Y sigo sin saberlo. No sé encajar los sentimientos. No sé encajar los pensamientos. Estoy volviendo a sobrepensar.

Dice ser bueno, me halaga la sonrisa, más que el cuerpo, me dice lo que le gusta hablar conmigo y no lo mucho que le gustaría verme entre sus piernas. Y en parte le creo, porque he visto como me ha mirado, como se ha fijado en los detalles, como me ha visto los ojos brillosos. Se ha fijado si estaba cómoda para quedarse y no irse. Se ha pasado su tiempo libre, de pie, a mi lado hablando de todo y de nada. 

Pero por alguna razón no le creo, desconfío y me siento con las garras abiertas. Se la razón, y es que me da pánico abrirme de nuevo y que me vuelvan a cerrar a la fuerza. Y yo no sabría como procesarlo, no cuando parece tan genuino y bueno. Quiero creerle, quiero fluir y dejar de preocuparme. Pero joder que miedo, que pánico. Todas las veces que pasa por el pasillito de delante yo lo paso con los ojos y una sonrisa. La sonrisa que le hizo venir a hablarme, porque cada vez que pasaba se la daba sin saber porqué.

Me gustaría que no me hubiesen echado abajo de nuevo, que me hubiesen tratado bien, que me hubiese rebajado las inseguridades y no creado otras nuevas. Porque ahora podría vivir esto de manera diferente, podría tirarme de una sin saber si el paracaídas se iba a abrir. Pero ahora me da miedo hasta ponérmelo a la espalda. No sé hasta que punto alguien puede sentirse bien sabiendo que le ha hecho esto a alguien. Que no puede disfrutar de conocer a otra persona porque no se quita de la cabeza la mierda que le han hecho.

Pero joder, yo quiero confiar. Yo quiero tirarme sin mirar. Yo quiero saber que cojones va a pasar con el. Me merezco esta oportunidad. Me merezco que cuando me mire, lo haga con una sonrisa, que saque tiempo para mi y que aún llevando horas de pie y sabiendo que le quedan otras cuantas por delante, venga y se pase el descanso de pie por hablar conmigo. Me merezco poder confiar y que no me ataquen las inseguridades por todos los lados que hay. Que no sobrepiense cada cosa que me dice, que hace. No pensar que va a ser tan cabron como lo han sido conmigo. 

¿Quién se puede sentir bien quitándole oportunidades así a alguien que le ha querido de verdad? 

No se si te sientes bien. Pero yo no. Yo quiero volver a confiar, pero por tu culpa no puedo. Yo quiero volver a dejarme querer, pero por tu culpa pienso que lo van a hacer mal. Yo quiero no pensar y tirarme a cada plan que me proponga, pero por tu culpa sobrepienso a cada palabra.

Pero que te jodan. Porque voy a saltar. Con miedo, pero pienso hacerlo. Yo me voy a dar la oportunidad. El me mira mejor de lo que lo has hecho nunca. El me dice cosas para que me ría porque "joder sonríe de verdad, con la sonrisa tan bonita que tienes". A ti solo te gustaba lo bonito que era mi culo. 

Jodete, porque le voy a dar una oportunidad.
Jodete porque ni de coña voy a dejar que tu mierda me afecte más.

Yo si fuese tu tampoco hubiese querido que aceptara el trabajo, porque entonces el no me hubiese saludado todos los días. Entonces el no hubiese entrado a decirme que llevaba lo cuernos por lo buena que era seguramente. Entonces el no me habría pedido el número con una indirecta pero mirándome a los ojos. Menos mal que ya no estás, porque te tirarias de los pelos. Si no lo estás haciendo ya.