1. Agua caliente

Debilita las fibras capilares y reseca el cuero cabelludo

Solución: Lava tu cabello con agua tibia y enjuaga con agua fría para sellar la cutícula

1. Cepillar el cabello mojado

Cuando el cabello esta mojado, es más vulnerable a romperse

Solución: Usa un peine de dientes ancho o un cepillo especial para cabello mojado

1. Aplicar productos en el cuero cabelludo cuando no es necesario

Algunos productos, como cremas o aceites, pueden obstruir los poros

Solución: Aplica productos solo en medios y puntas, a menos que estén diseñados para el cuero cabelludo.

1. No usar protector térmico

El calor de las herramientas como planchas y secadores puede quemar tu cabello

Solución: Protege tu cabello con spray térmico antes de usar herramientas de calor

1. Dormir con el cabello suelto

Esto puede causar fricción, enredos y puntas abiertas.

Solución: Recoge tu cabello en una trenza suave o usa una funda de almohada de satén