Imagina ser una joven de 19 años, embarazada, en medio del vasto océano y enfrentarte a una tripulación amotinada. Esto no es una escena de película, sino la increíble historia real de Mary Ann Brown Patten, la primera mujer en comandar un buque mercante estadounidense en el siglo XIX .
Mary Ann nació el 6 de abril de 1837 en Chelsea, Massachusetts. Desde temprana edad, mostró una curiosidad y fortaleza inusuales. En 1853, a la edad de 16 años, se casó con Joshua Adams Patten, un joven capitán del clipper Neptune's Car, conocido por su velocidad y elegancia.
En 1856, Mary Ann se embarcó en un viaje que cambiaría su vida para siempre. A bordo del Neptune's Car, rumbo de Nueva York a San Francisco, su esposo Joshua enfermó gravemente de tuberculosis, dejándolo incapacitado. Con el primer oficial también enfermo y el segundo oficial sin experiencia, Mary Ann asumió el mando del barco en medio del océano.
Durante 56 días, Mary Ann navegó el Neptune's Car a través de tormentas y peligros, enfrentando un intento de motín y desafiando todas las probabilidades. Su conocimiento de la navegación y su valentía mantuvieron a la tripulación a salvo y llevaron el barco a puerto en San Francisco. Mary Ann, con su determinación y habilidades, demostró que una mujer podía liderar con éxito en un mundo dominado por hombres.
Aunque fue aclamada por su heroísmo al llegar a San Francisco, la sociedad de la época no estaba preparada para aceptar a una mujer en un rol de liderazgo en la marina. Mary Ann murió el 17 de marzo de 1861, a los 23 años, poco después de dar a luz a su hijo. Sin embargo, su legado perdura como un símbolo de coraje y determinación.
