La esperanza flaquea, espero que llegue el día en que el quizá se vista de certeza, y ya no naveguen las dudas en mi mente.
Porque esperar respuestas a esta agonía es como esperar diluvios en un desierto seco.
Los pensamientos atacan y cada vez son más constantes,
Triste es ver al cielo y esperar que un arcoíris pinte el cielo.
Y las lagrimas inundan mi rostro, los sueños se me escapan y ya no puedo agarrarlos, sostenerlos en mi palma.
Cuantos pasos errados debo dar para llegar al camino correcto?
Porque sigo corriendo en círculos y mis talones ya están cansados.
Me duele el peso de la soledad, estoy cansada de pedirle deseos a las estrellas.
De creer que el destino me tiene algo preparado
Y no recibir nada