En su libro de predicciones Ludovica adelanta que el sagrado Dragón vivirá un revelador viaje interior. “En este año, los dragones volverán a la fuente suprema de su pertenencia, su hogar original, o armarán su cueva nueva, porque ya dejarán de sumar millas por los cielos, y sentirán la vida desde el mudhalara para abajo, la tierra, lo enclavado, su raíz y su dignidad resuelta”, escribe.

Un poco distinto será el recorrido del noble Búfalo (llamado a veces buey), el segundo animal del zodiaco. Habrá una sensación de alivio para este signo, para quien el año del Dragón represento una experiencia agotadora.

Squirru califica la afinidad entre ellos y la Serpiente como “maravillosa” y adelanta en su libro lo siguiente: “Tendrán muchos temas en común para compartir y sanar años de separaciones, peleas, rencores y venganzas mutuas”.