Das el primer paso. Resuelve problemas sin esperar a lo que te piden.
Te interesa el éxito y bienestar de tu equipo, no solo el tuyo propio.
Expresas ideas con eficacia y escuchas para entender, no solo para responder.
Tu equipo busca tu consejo porque confían en tu juicio e integridad
Tus actos hablan más que tus palabras .
Animas a tu equipo, comparte el mérito y los impulsas a ser mejores
Asumes tus errores y cumples con promesas. La gente confía en ti
En lugar de quejarte de los problemas, buscar formas de solucionarlos