A menudo damos por sentadas esas pequeñas maravillas de la tecnología que hacen nuestra vida más fácil, pero detrás de cada uno de estos objetos hay un proceso fascinante que merece ser comprendido.
Comencemos con la cerradura: ese mecanismo que asegura nuestro hogar. ¿Cómo es posible que solo una llave pueda abrirla? Dentro de la cerradura se encuentran pernos y tambores que descansan a distintas alturas .
Pasemos ahora al microondas, el héroe silencioso de la cocina. Este aparato utiliza radiación electromagnética para calentar los alimentos, haciendo que las moléculas de agua dentro de ellos se muevan rápidamente y generen calor. Dentro del microondas, el magnetrón, un pequeño filamento metálico, emite estas microondas que rebotan en las paredes metálicas del horno, distribuyendo el calor de manera uniforme. Y lo mejor de todo: no necesitas estar cerca de la fuente de calor, ¡el microondas hace todo el trabajo por ti!
Y por último, el excusado, un invento que parece tan sencillo pero que es un prodigio de ingeniería. Su funcionamiento se basa en el sifón, una tubería en forma de S que mantiene el nivel de agua constante en la taza y evita que los olores desagradables suban por las cañerías. Al tirar de la palanca, el agua fluye con fuerza, activando el sifón y empujando los desperdicios hacia la cañería en un proceso que no tarda más de 6 segundos. ¡Un sistema tan eficiente como rápido!