Estoy en un momento de mi vida en el cual si me mandan a la mierda hasta me voy feliz y la razón es porque mi prioridad es vivir tranquila y claramente esa tranquilidad tan anhelada no se consigue conviviendo con personas tóxicas.

Alguna vez le escuché decir a alguien “La amistad se basa en la empatía y eso a su vez es el reflejo de uno mismo; somos lo que nos rodea.” Es por eso que la vida misma se encarga de alejarnos en el momento indicado de las personas menos indicadas.

Y es que resulta que cada quien alimenta su cuerpo y su alma de lo que quiere, cada quien cree lo quiere creer, ve lo que quiere ver, escucha lo que quiere escuchar y al final de todo esto cada quien dice lo que le conviene y es justo en este error en el que sin darnos cuenta a veces caemos, porque nos negamos a creer verdades que duelen, verdades que para muchos son evidentes pero que para nosotros en medio de nuestra ceguera y dolor son inaceptables.

Lamentablemente muchas veces terminamos rodeados de las personas equivocadas y a veces ellas terminan siendo con quienes más compartimos momentos importantes de nuestra vida; por eso es que a lo largo de este camino terminas entendiendo que en esta vida tienes muchos conocidos algunos compañeros y muy pocos amigos.

A golpes se aprende y después de muchas experiencias llegué a la conclusión de que NO QUIERO AMISTADES TÓXICAS en mi vida . NO QUIERO convivir con una persona que vive de apariencias, con personas para las cuales solo existes cuando hay una fiesta, con personas que te buscan y te tratan bien solo cuando les conviene, personas que cuando tu estás presente te tratan con respeto y fingiendo cariño pero cuando estás ausente eres el primero en la lista de críticas, personas que cuando cometen errores buscan cualquier pretexto estúpido para tratar de ocultar los daños que hicieron , personas para quienes tú eres una segunda opción cuando la primera no les funciona o no está, personas para quienes ser un hipócrita pareciera que se les hubiera convertido en un requisito para ser socialmente aceptados.

Abrir los ojos y tomar la decisión de alejarse a veces duele y mucho , porque bien o mal esas personas hicieron parte de tu crecimiento personal o profesional ( o incluso ambas ) , con esas personas en algún momento compartiste, te abrasaste , reíste, lloraste … VIVISTE. Es por eso que la desilusión y el golpe al abrir los ojos y darse cuenta de la realidad es tan duro, pero ¿Qué puede ser más cruel que vivir engañado eternamente?

Y es que claramente no existe mayor decepción que la de mirar atrás y darte cuenta que metiste las manos al fuego por esa o esas personas que hoy en día son el más grande sinónimo de hipocresía y mentira , por personas sobre las cuales la historia de Judas es un piropo comparado con la de ellas.

Después de esto la gente te dice que cambiaste, ¡CLARO! cuando se dan cuenta que ya no eres el bobo que se deja hacer todas las traiciones y cagadas que te hacían antes y es que precisamente las personas o los que dicen ser tus “ amigos “ se acostumbran a que si la cagan mil veces, mil veces tú los perdonas y es por eso que siempre nos terminan viendo la cara de pendejos, PERO ESO SE TERMINÓ porque he aprendido a alejarme de quienes me han desilusionado, porque en este momento ya no se me da eso de simplemente pasar la página , ahora cuando me defraudan, la arranco.

Finalmente nos podemos dar cuenta cómo de forma ingenua abrimos las puertas de nuestro corazón y de nuestras vidas a quienes creemos que son los correctos , es por eso que también aprendí que las personas tenemos que SER SELECTIVAS , porque resulta que no siempre el que te sonríe y te abraza es tu mejor amigo, tu confidente, tu parcero y mucho menos tu hermano y no es que yo sea una antipática o una malgeniada , es simplemente que AHORA no dejo entrar a mi vida al primero que pretenda convencerme con palabras lindas.

Puede sonar a frase de cajón pero “siempre va a ser más importante la calidad que la cantidad”, muchos o pocos amigos, lo que importa es que sean los que son y los que verdaderamente valen la pena, porque siempre para mí lo primordial será mi tranquilidad y que mejor que tenerla que con personas que de verdad hablen tú mismo idioma.

Si usted que está leyendo esto quiere entrar a mi vida tiene que saber y tener claro que yo parto de la HONESTIDAD y la LEALTAD, si esos conceptos nos existen como lema en su vida y en su mente lo invito a que se retire, no me interesa.

Vivir y dejar vivir… así de simple