Los modales en la mesa no solo son una cuestión de apariencia; reflejan tu educación, respeto por los demás y, en muchas ocasiones, pueden incluso ser determinantes en situaciones laborales o sociales.
Ya sea que te enfrentes a una cena casual o un evento más formal, es esencial comprender las normas básicas de etiqueta que guían cómo comportarse alrededor de la mesa. Desde la correcta disposición de los utensilios hasta los pequeños detalles como el uso de la servilleta, cada gesto cuenta.
En este post, te revelamos todo lo que necesitas saber para dominar los modales en la mesa y no solo evitar embarazos, sino también brillar en cualquier situación social .
La Postura Perfecta: ¡Nada de caer en la tentación de relajarse demasiado! Siéntate erguido y cómodo, y nunca olvides que los modales en la mesa también incluyen el comportamiento con tu cuerpo. Nada de poner los codos sobre la mesa mientras comes, y mucho menos distraerte con el celular.
¿Cuándo Comer?: Uno de los errores más comunes es comenzar a comer antes de lo indicado. Recuerda, espera siempre a que el anfitrión empiece y a que todos los comensales tengan su comida antes de probar la tuya.
El Uso de los Utensilios: En las mesas formales, el manejo de los cubiertos tiene un código. ¡No te preocupes! Es más fácil de lo que parece. Solo recuerda: se usan desde afuera hacia adentro. Y si estás en una cena más relajada, sigue utilizando el buen juicio para no parecer que estás en una parrillada informal.
Conversación y Comida: Comer no es solo una cuestión de lo que está en tu plato; también es parte de compartir un buen momento con los demás. Mantén un ritmo adecuado, no comas ni muy rápido ni muy lento, y sobre todo, mastica con la boca cerrada y participa en la conversación.
Servir y Compartir: Si la comida es servida de manera familiar, no toques los platos directamente con las manos, pasa los cuencos de izquierda a derecha y sírvelos con los utensilios correspondientes. Además, si alguien te pide sal, ¡pásala junto con la pimienta!
El Buen Uso de la Servilleta: La servilleta es un accesorio clave para mantener la compostura. Utilízala adecuadamente para limpiarte los labios o cualquier mancha, pero nunca la pongas sobre tu plato al final de la comida. Un gesto sencillo que refleja tu educación y refinamiento.
Brindis y Bebidas: En un brindis, nunca seas el primero en beber. Espera a que el anfitrión comience y mantén una actitud respetuosa con el consumo de alcohol. ¡Moderación ante todo!
