El nombre Felipe tiene un origen griego y proviene de la palabra "Philippos", que significa "amante de los caballos" (philos: amor, hippos: caballo). Era un nombre común en la antigua Grecia y se asocia frecuentemente con figuras de gran relevancia histórica, como Filipo II de Macedonia, el padre de Alejandro Magno.
El nombre se popularizó en el mundo cristiano debido a San Felipe Apóstol, uno de los doce discípulos de Jesús .
Felipe es un nombre que simboliza nobleza, liderazgo y fortaleza, características que han hecho que sea transmitido a través de generaciones en distintas culturas.