Palabras que Despiertan Sueños⛅️?

A las 5:30 a.m., el despertador sonó como todos los días. Sofía abrió los ojos con dificultad y miró el techo de su pequeña habitación .

Su rutina era la misma: levantarse, ir a la universidad, trabajar por la tarde en la cafetería y regresar agotada por la noche. Cada día era una batalla entre sus responsabilidades y su gran sueño: convertirse en escritora.

Desde niña, había encontrado refugio en las palabras. Llenaba cuadernos con historias que nunca mostraba a nadie, temerosa de que el mundo le dijera que no era lo suficientemente buena. Pero, en lo más profundo de su corazón, sabía que escribir era lo que realmente la hacía sentir viva.

Una tarde, mientras limpiaba mesas en la cafetería, escuchó a dos clientes hablar sobre un concurso literario. "El ganador podrá publicar su primer libro", mencionó uno de ellos. Sofía sintió un vuelco en el pecho. ¿Y si lo intentaba?

Esa noche, se sentó frente a su viejo computador y empezó a escribir sin detenerse. Durante semanas, aprovechó cada minuto libre para dar vida a su historia. No fue fácil: el cansancio la vencía a veces, las dudas la atormentaban, pero se obligó a seguir adelante.

El día de la entrega, con manos temblorosas, envió su manuscrito. El miedo la invadió. "¿Y si no soy suficiente?", pensó. Pero recordó todas las noches en vela, la pasión en cada palabra y la promesa que se había hecho a sí misma: nunca rendirse.

Pasaron semanas de incertidumbre hasta que, una mañana, recibió un correo. Su corazón latía con fuerza mientras leía: **"Felicidades, has sido seleccionada"**.

Las lágrimas corrieron por sus mejillas. Por primera vez, entendió que los sueños no son solo para quienes nacen con talento, sino para quienes tienen el valor de perseguirlos.

Ese día, Sofía dejó de ser una simple soñadora y comenzó a despertar a la realidad que siempre había deseado.

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