Escribir: Te ayuda a clarificar tus pensamientos y sensaciones.
Meditar: Te ayuda a crear espacio interno para procesar tus emociones.
Hablar: Te ayuda a entender mejor qué sientes y por qué.
Contemplar: Te ayuda a acomodar y a asentar tus emociones.
Dibujar: Te ayuda a dejar fluir libremente tus emociones.
Bailar: Te ayuda a liberar las energías estancas en tu Cuerpo