Un gran error que muchos cometen es esperar que los demás se les acerquen en reuniones
A no ser que seas una persona de estatus o muy atractiva, esto hará que la termines pasando solo.
Por eso, recuerda que:
Tu eres quien elige a los demás, no quien es elegido”
Y sigue estos pasos al llegar a una reunión
Busca en los demás algo que te llame la atención. Puede ser su traje o como camina o usa su cuerpo al hablar .
“¡Hola mucho gusto! ¿Vives en la ciudad o viniste por el evento?”
“¿Qué tal? ¿Cómo conoces a Carla (la anfitriona del evento)?”
Ambos funcionan de maravilla porque no necesitas conocer NADA de la persona. Además, mostraras interés, pero de forma indirecta.
Haz una transición a una conversación casual
Si te responde:
“¡Hola! Conozco a Carla del colegio. De toda la primaria, de hecho. Siempre fuimos amigas”
Responde así:
“¡Ah, que genial! Yo la conozco porque trabajamos juntos hace años. ¿Y cómo era Carla en el colegio, ah? Me da mucho curiosidad”
Lo que hiciste fue usar un dato que conseguiste con tu abridor inicial, para formular tu siguiente pregunta.
Y de una manera muy sencilla, acabas de acercarte a un completo desconocido y con una excusa perfecta. Algo que muy pocos se atreven a hacer.
