rutina completa y detallada para que empieces a aplicarla esta misma noche y empieces a sentir los beneficios de una buena noche de descanso:
Organiza tus horariosEl primer paso es darle estructura a tus noches. Elige un horario para acostarte y despiértate a la misma hora todos los días .
Apaga las pantallasLa luz azul de las pantallas (teléfonos, computadoras, televisores) interrumpe tu producción de melatonina, la hormona que te ayuda a dormir. Asegúrate de dejar el teléfono y otros dispositivos al menos una hora antes de dormir. Si te cuesta desconectarte, prueba usar unas gafas bloqueadoras de luz azul o hacer lo que yo hago: agarra un diario y escribe tus pensamientos. Esto te ayudará a vaciar tu mente y relajarte.
Haz tu rutina de higieneCuida de ti mismo antes de acostarte. Si te duchas por la noche, aprovecha ese momento para relajarte. Si no, por lo menos asegúrate de lavar tu cara y aplicar crema hidratante. Es como un pequeño ritual que le dice a tu cuerpo que es hora de descansar. Y no olvides la higiene bucal: no hay excusa para irse a dormir con la boca sucia.
Calma tu menteSi tu mente sigue acelerada, haz algo para calmarla. Evita la cafeína después de las 5 p.m. y corta los estímulos antes de dormir. Nada de Netflix, series o música; aunque puedan parecer relajantes, siguen manteniendo tu cerebro activo. Opta por actividades tranquilas como leer o escribir, que ayudarán a que tu cerebro se desconecte y te prepares para un sueño profundo.
Arregla tu habitaciónAntes de dormir, dedica unos minutos a organizar tu espacio. No se trata de un cuarto perfectamente ordenado, pero un entorno limpio y ordenado te ayudará a sentirte más tranquilo y enfocado. Además, cuando tu habitación está limpia, tu mente también lo está.
Evita los suplementos innecesariosLos suplementos como la melatonina no son la solución mágica. Si bien pueden ayudarte en ciertos momentos, no te hagas dependiente de ellos. En lugar de eso, enfócate en crear una rutina sólida. Si necesitas algo adicional, prueba con magnesio o ashwagandha, pero sólo como apoyo ocasional.
Usa tu cama solo para dormirElimina la costumbre de usar la cama para ver televisión, trabajar o comer. Esto ayuda a que tu cerebro asocie la cama solo con el descanso, lo que facilita que te duermas más rápido. Si no puedes dormir, levántate, haz una actividad tranquila como leer o escribir en tu diario, y vuelve a intentarlo cuando te sientas listo.