"Emilia Pérez" es una película que se ha ganado las críticas más feroces de los cinéfilos y espectadores por igual, y no precisamente por sus méritos artísticos. En este post, te contamos por qué esta obra está siendo considerada una de las mayores faltas de respeto hacia México y sus tragedias.
La película, que debería haber sido un tributo a la cultura y realidad mexicana, termina siendo un desfile de errores: desde actores mal escogidos hasta una dirección que carece de la mínima comprensión sobre el país que pretende retratar .
Pero el verdadero escándalo de "Emilia Pérez" radica en la forma en que maneja temas tan sensibles como la violencia y el narcotráfico en México. Lo que podría haber sido una crítica social o una obra con la intención de provocar reflexión, se convierte en un burdo intento de tratar tragedias nacionales como material para un musical vacío y burlesco. La película no solo se ríe de las víctimas, sino que parece glorificar a los villanos de una forma tan superficial y despectiva que es imposible no sentirse ofendido.
¿Pero cuál es el colmo? Que la película intenta ser un producto comercial y provocador, pero lo único que logra es desinformar y trivializar problemas profundamente arraigados en la sociedad mexicana. En lugar de abrir un espacio para el diálogo sobre las fosas comunes, las desapariciones forzadas y las masacres, "Emilia Pérez" prefiere tomarse todo a la ligera, dejando una sensación de indignación y frustración.