Haz tu cama
Algo tan simple como tender y organizar la cama en las mañanas, libera químicos que te hacen sentir bien, y te predisponen para un día productivo
Ducha fría
Date una duche tibia de 5 minutos y al finalizar rocíate un poco de agua fría durante unos segundos. Está demostrado que estimula tu sistema circulatoria, recargándote de energía y liberando endorfinas
Respiraciones profundas
Respira por 5 segundos sostén la respiración otros 5, y luego exhala contando también hasta 5.
La respiración lenta y profunda le hace entender a tu cerebro que está en paz fuera de peligro
Fíjate una meta
Revisa y prioriza tus tareas del día .
Si tu cerebro tiene un objetivo claro, hará todo lo posible para alcanzarlo.
Decreta con afirmaciones positivas
Las afirmaciones positivas ayudan a combatir las creencias limitantes y estimulan una mentalidad segura. Cuando se pronuncian por la mañana, con la mente fresca, su efecto es más poderoso.
Recuerda tus logros y agradece
Tomate unos minutos cada mañana para recordar tus logros y sueños cumplidos.
Analiza lo que ha salido bien, reconócete en tus logros y se consciente de todo lo que has aprendido.
Visualiza tu día
Esto no solo manifestara tus intenciones sino que te ayudara a prever posibles contratiempos y saber cómo afrontarlos.