Durante la adolescencia temprana, que generalmente abarca entre los 10 y 14 años, los niños experimentan una serie de cambios tanto físicos como emocionales que afectan profundamente su comportamiento. Estos cambios son parte de un proceso de maduración natural que puede llevar a una variedad de reacciones y ajustes, tanto para los adolescentes como para sus padres y educadores.
Uno de los aspectos más notables de esta etapa es el inicio de la pubertad .
La adolescencia temprana es una etapa en la que los adolescentes comienzan a experimentar una amplia gama de emociones intensas. Su capacidad para manejar estas emociones, como la frustración, la tristeza, la euforia o la ira, puede estar en desarrollo. Las fluctuaciones hormonales juegan un papel importante en estos altibajos emocionales. Además, los adolescentes tienden a buscar independencia de sus padres, lo que puede generar conflictos en el hogar. A menudo buscan la aprobación de sus pares y pueden mostrar comportamientos impulsivos o riesgosos, ya que la toma de decisiones racionales no está completamente desarrollada.
La relación con los amigos se convierte en un aspecto central de la vida de los adolescentes. Comienzan a valorar más la aceptación social y la pertenencia al grupo, lo que puede llevar a comportamientos de conformidad o, en algunos casos, a la presión de los compañeros. Es una etapa de exploración de identidad, en la que los adolescentes prueban diferentes roles y pueden empezar a cuestionar las normas sociales o familiares.
El pensamiento en la adolescencia temprana también comienza a diferir del de la infancia. Los adolescentes desarrollan una mayor capacidad para pensar de manera abstracta y reflexiva. Esto puede llevarlos a cuestionar su entorno y las creencias que antes aceptaban sin dudar. A menudo, se sienten invulnerables y, por tanto, pueden participar en comportamientos riesgosos. Esta fase también está marcada por el desarrollo de la toma de decisiones, aunque a veces aún puede ser influenciada por la impulsividad o el deseo de pertenecer al grupo.
En resumen, los cambios de comportamiento durante la adolescencia temprana son una respuesta a los cambios físicos, emocionales, sociales y cognitivos que los adolescentes experimentan. Estos cambios son naturales, aunque desafiantes, y pueden variar de un adolescente a otro. La clave es el acompañamiento adecuado, la comprensión y la paciencia por parte de los adultos para ayudarles a navegar esta etapa de transición.