El desarrollo emocional en la infancia es un proceso crucial para el bienestar y el crecimiento de los niños. A medida que los niños crecen, aprenden a comprender, expresar y gestionar sus emociones, lo que les permite interactuar adecuadamente con su entorno y otras personas .
Primera infancia (0-2 años):
Infancia temprana (2-6 años):
Niñez media (6-12 años):
Adolescencia (12 años en adelante):
El ambiente familiar:
Las experiencias sociales:
La cultura y los valores sociales:
La genética y factores biológicos:
El desarrollo emocional adecuado en la infancia es fundamental porque:
En resumen, el desarrollo emocional en la infancia es esencial para el bienestar general del niño. Los adultos desempeñan un papel crucial en apoyar a los niños para que aprendan a identificar, comprender y gestionar sus emociones de manera efectiva.