Empiezo a pensar que el destino no quiere que me enamore o que simplemente cupido no quiere flecharme.
Empiezo a pensar que soy gafe respecto al amor y que las relaciones no están hechas para mi.
Tengo el corazón hecho pedazos y no sé cómo empezar a juntar los trozos, y cada vez que creo que lo estoy consiguiendo viene alguien y lo remata.. .
Y así nunca podré componerlo del todo.
Y creo que es mejor así porque nadie puede volver a romper un corazón que ya está roto.