El mundo está lleno de datos sorprendentes, y aunque vivimos en la era de la información, hay cosas que simplemente no solemos cuestionar. Aquí te presentamos seis hechos fascinantes que desafiarán tu percepción del tiempo, las costumbres y hasta la forma en que recordamos .

1. El tiempo, ese gran enigma
¿Sabías que hay más tiempo entre el último T-Rex y nosotros que entre el T-Rex y el Brontosaurio? ¡Así es! Aunque los dinosaurios compartan espacio en nuestras cabezas y películas, muchas especies jamás convivieron. Lo mismo pasa con Cleopatra: vivió más cerca de nosotros que de la construcción de las pirámides. Es una realidad que reconfigura nuestra idea de la historia.

2. ¿Rosa para niños y azul para niñas?
Si alguna vez escuchaste que el rosa era el color masculino, estás frente a una leyenda urbana con más agujeros que certezas. Desde hace siglos, las normas de color estaban más relacionadas con modas y costumbres que con géneros. Así que no, el marketing no hizo todo el trabajo, pero las dudas y los cambios culturales lo mantuvieron interesante.

3. La paradoja del ejercicio
¿Crees que hacer más ejercicio garantiza quemar más calorías? Lamento romper el mito: el cuerpo humano es increíblemente eficiente y ajusta su gasto energético. A largo plazo, las calorías quemadas son similares a las de alguien sedentario. Eso sí, el ejercicio es fantástico para la salud, pero perder peso sigue siendo más una cuestión de balance calórico.

4. El hombre que atravesó un Picasso
Steve Wynn, un multimillonario coleccionista, tuvo un accidente surrealista: atravesó con su codo El Sueño de Picasso, una obra que estaba a punto de vender por 139 millones de dólares. Al final, tras restaurarla, la vendió años después ¡por 155 millones! A veces, los errores cuestan... pero no siempre.

5. Vacaciones para peluches: solo en Japón
En Japón, puedes enviar a tu peluche de vacaciones: visitan lugares, toman fotos y vuelven a casa con recuerdos. Aunque suena excéntrico, esta curiosa idea genera millones y hasta conecta a personas en redes sociales. ¿Imaginaste que tu oso de peluche tendría más vida social que tú?

6. Nuestra memoria tercerizada
¿Te ha pasado que no recuerdas algo, pero sabes dónde buscarlo? Es el famoso "efecto Google", aunque en realidad empezó con los libros. Ahora, más que memorizar datos, aprendemos a encontrarlos, lo que redefine la erudición. No es malo olvidar, pero sí no saber buscar.