Camille Claudel nació el 8 de diciembre de 1864 en Fère-en-Tardenois, Francia. Desde muy joven, mostró un talento excepcional para la escultura, lo que la llevó a trasladarse a París en 1881 para estudiar en la Academia Colarossi .
En 1898, su vida dio un giro drástico cuando fue internada en un asilo psiquiátrico por su familia, donde pasó los siguientes 30 años de su vida. Escribe cartas a amigos y familiares pidiendo ayuda e intentará explicar al personal del hospital la injusticia que está viviendo, son testimonios desgarradores, que revelan la lucidez de la mujer internada.
Durante este tiempo, su obra fue en gran parte olvidada, y su salud mental se deterioró.
A pesar de su sufrimiento, Claudel continuó creando esculturas en el asilo, aunque muchas de ellas se perdieron o fueron destruidas.
Su legado artístico fue redescubierto en las últimas décadas del siglo XX, cuando críticos y historiadores comenzaron a reconocer su contribución al arte y su lucha como mujer en un campo dominado por hombres.Camille Claudel muere prácticamente de hambre el 19 de octubre de 1943 en el hospital público Montdevergues en francia y ningún miembro de su familia asistirá a su funeral. Sus restos serán depositados en una fosa común.
Su vida y obra han sido objeto de numerosos estudios, libros y películas, que han ayudado a resaltar su talento y la injusticia que sufrió a lo largo de su vida. Hoy en día, es considerada una pionera en el mundo de la escultura y un símbolo de la lucha de las mujeres artistas.Hoy la figura de Camille Claudell ha sido completamente rehabilitada, sus obras se exponen junto a las de Rodin y un museo a pocos kilómetros de París está completamente dedicado a ella
La historia de Camille Claudel es un recordatorio de la importancia de reconocer y valorar el trabajo de las mujeres en el arte y la cultura. Su legado perdura, inspirando a nuevas generaciones de artistas a seguir sus pasos y a luchar por su lugar en el mundo del arte. A través de su obra, Camille Claudel continúa hablando, desafiando las normas y dejando una huella imborrable en la historia del arte.