Hola buenas. Me presentaría, pero solo sería una pérdida de tiempo .Para simplificarlo vamos a dejarlo en que yo, soy Nadie. Nadie ya no tiene sentimientos, o al menos lo intenta. Nadie se esfuerza por alejar a los demás, porque si no tienes ninguna persona que quiera confiar en ti, no le puedes fallar a nadie.
Pero esto no va de mi, hoy he venido a hablarte de Ella. Y joder, ella sí es alguien. No puedo empezar a hablarte de ella como lo haría cualquier otro con un: "ella es de esas.. " porque es que no hay nadie que se le asemeje. Ella es ese primer día de verano. Que no tienes ni puta idea de que vas a hacer o donde vas a acabar con él, pero que aún así, tienes claro que no ha empezado y no quieres que se acabe. Ella es ese helado que no puedes resistirte a comer un 14 de Agosto a medio día, en el que no encuentras refugio ni debajo de un puente. Si tú supieras.. Ella es como esa ducha después de entrenar, cuando te duelen todos los huesos, y después del baño te tumbas en la cama, y si es con Ella, podrías llegar a creerte el rey del mundo. Ella es ese petardazo antes de empezar los sanfermines, que puedes no tener ni pajolera idea de que significa, pero antes de que te des cuenta, la emoción ya está en tus venas.
Ella cree que nadie la entiende, pero lo que ella no sabe es que a veces Nadie y ella, se parecen más de lo que ninguno de los dos se pudiera imaginar.
Ella, en ocasiones, puede ser el propio Vesubio, y él se dejaría arder como Pompeya, con tal de quedarse a su lado para siempre. Otras veces, puede ser fría e irse hasta el infinito sola, como el espacio, y pese a ello, nadie será capaz de retener a Nadie de ir tras Ella aún faltandole el oxígeno.
Ella es esa sorpresa que te llega tan de repente que no te deja pensar más que en lo que tienes delante. Es eso incesantemente. Y, cuando sonríe, joder, cuando sonríe es pura magia sin explicación plausible para Nadie.
Porque para Nadie, Ella es como ese regalo de Navidad que llevas toda una vida esperando. Que te despiertas al día siguiente y sin pensarlo dos veces, lloras creyendo que todo ha sido un simple sueño. Y sorpresa, Nadie corre hacia Ella con el corazón alborotado como nadie más podría hacerlo, con las pupilas dilatadas cuál pez globo ante un depredador.
Puede que a Ella no haya nadie que la entienda, pero Nadie no se cansa de intentarlo.
A nadie le gusta madrugar, pero para Nadie, Ella es mejor que levantarse tarde. Ella no es esa canción que oyes una vez y no paras de escucharla hasta que la aborreces. Para Nadie, Ella es esa banda sonora que se creó para acompañarle toda su vida. Algunas veces a todo volumen aunque les reviente a los vecinos, y otras casi como con susurros para que nadie se entere. Ella es ese tipo de locura que te vuelve más cuerdo, pero a nadie le gusta vivir para siempre la normalidad de la rutina; y a Ella la falta de planificación de Nadie la vuelve loca.
Ella es más de chocolate, y Nadie es incapaz de decirle que no a un caramelo. Nadie es más de películas, y Ella prefiere sentarse, tumbarse o incluso ponerse boca abajo para leer. Y sin embargo nadie consigue explicarles porque ambos se encuentran mejor por la noche.
Porque Nadie es capaz de levantarse a cualquier hora, pero Ella es incapaz de dormir sin pasar primero por el baño.
Ella es más de huir de sus miedos y Nadie le ha dicho que es mejor enfrentarse a ellos.
Y si os digo que aún así, Nadie es capaz de romper con los esquemas de Ella. Porque a veces Ella es tan gélida como Yakatusk, pero una vez bajo las sabanas nadie le podria explicar porque se siente tan bien si Nadie la abraza.
Ella es todos y cada uno de los viajes que has hecho y te quedan por hacer, que con cada uno de ellos vas cambiando y Nadie ve algo nuevo en ella con cada viaje, incluso en los más pequeños, como cuando unía sus lunares con besos, y aunque Ella no lo soporte, sabe que es la forma más honesta que le ha enseñado Nadie.
Ella es como ese primer sorbo de tu copa favorita, ya sea una noche cualquiera o la noche que celebras tu nacimiento, si bien cabe decir Nadie odia los cumpleaños.
Ella es ese secreto más íntimo que nadie puede saber, y Nadie es incapaz de recitar con palabras.
Que a Ella le encanta ponerse colores en los ojos, quizás para tapar las ojeras que no quiere que nadie vea de sus insomnios, y sin embargo a Nadie le encanta cuando llega a casa, se desmaquilla y se pone su camiseta ancha de pijama.
Que Ella es de ponerle buena cara a todo el mundo en la calle, pero cuando de verdad se ve sola en casa, que no puede más y no tiene a nadie, rompe a llorar sin que Nadie lo sepa. Y no se da cuenta que no habría cosa que le gustará más a Nadie que poder estar ahí.
Que los días que Ella no aguanta el mundo y no hay nadie que la soporte, Nadie estaría en primera fila para hacer de saco de boxeo si hiciera falta. Porque no hay nadie en el mundo que fuera a ver lo que Nadie ve en Ella.
Ella loca que no encuentra nada que merezca la pena, nadie que le baje la luna, y Nadie con mil pájaros en la cabeza que le cantan como sería llevarla a la luna para tenerla solo para él.
Ella en definitiva, es como ese olor a goma quemada. Puede encantarte, puede gustar mucho en el momento, te puede hacer feliz toda tu vida pero Nadie va a decirte que a veces puede acabar muy mal...
Y tú ¿qué eliges, te quedas con Nadie o con Ella?