Si te gustan las películas de terror clásicas, definitivamente te recomiendo Halloween (1978). Es una de esas películas que marcó un antes y un después en el género, y todavía sigue siendo aterradora hoy en día.
La historia se centra en Michael Myers, un asesino que escapa de un manicomio y regresa a su vecindario para acechar y matar a un grupo de adolescentes, especialmente a Laurie, interpretada por Jamie Lee Curtis .
Lo que realmente me encanta de Halloween es cómo construye el suspenso. No es solo una sucesión de muertes gore, sino que juega con la anticipación, con la idea de que el peligro está siempre al acecho. Michael Myers es uno de esos villanos que no necesita muchas palabras para imponer miedo; su presencia y su máscara lo dicen todo.
La música también es icónica, y la banda sonora de John Carpenter es perfecta para la película. Es simple, pero se queda contigo mucho después de que termine el filme.
Si aún no la has visto, o si hace tiempo que no la ves, te animo a que la pongas en tu lista. Es una de esas películas que nunca pierde su toque espeluznante, y realmente te hace sentir esa sensación de terror que solo las películas de esa época pueden dar.