Algunas películas y series han logrado anticipar el futuro con una sorprendente precisión, prediciendo tecnologías, avances sociales o incluso situaciones políticas que luego se materializaron. Una de las más conocidas es 2001: Odisea del espacio (1968), que, a pesar de ser lanzada hace más de 50 años, mostró una visión sorprendentemente exacta de la tecnología espacial, desde las estaciones orbitales hasta las interfaces de inteligencia artificial como la famosa HAL 9000, que recuerda a los asistentes virtuales modernos.
En el ámbito de las series, Black Mirror es un ejemplo claro de cómo la tecnología avanza y sus posibles consecuencias sociales .
Otra película que anticipó varios avances fue Minority Report (2002), que no solo introdujo la idea de la predicción del crimen a través de tecnología, sino también pantallas táctiles, interfaces de reconocimiento ocular y vehículos autónomos, elementos que hoy son comunes en la tecnología moderna.
Estas obras muestran cómo los cineastas y guionistas no solo son visionarios, sino también reflexivos sobre el impacto que las innovaciones tecnológicas pueden tener en nuestras vidas.