El pensamiento positico no es solo una forma de ver la vida, es también una poderosa herramienta que da forma a nuestra realidad y a nuestro potencial interior. La mente humana tiene una capacidad única para influir en nuestras emociones con lo que llo supone a la hora de decidir y actuar.
Cuando nos enfocamos en lo positivo, entrenamos a nuestro cerebro para buscar las mejores soluciones en lugar de crear continuos problemas, y encontrar oportunidades en vez de obstáculos.
Adoptar una mentalidad de crecimiento permanente significa aceptar que los desafíos que se afrontan sin éxito, no son fracasos sino lecciones de vida que nos fortalecen .Es elegir cada día ver las posibilidades de conseguir el objetivo en lugar de estar atados de pies y manos por las limitaciones autoimpuestas.
Sin embargo, crear patrones de pensamiento negativo puede convertirse en una barrera insalvalble que restringe nuestro desarrollo, nos llena de dudas permanentes y nos desconecta por completo de nuestras capacidades innatas.
Poner en práctica el pensamiento positivo no quiere decir que se ignoren los problemas ni mucho menos,sino que hay que enfrentarse a ellos con resiliencia, decisión y optimismo. Es un recordatorio de que nuestras creencias internas pueden ser el trampolín que nos lleva directamente al bienestar y al éxito.
Fran Laviada