La filosofía estoica, que se originó en la antigua Grecia, ofrece valiosas enseñanzas sobre cómo mantener la serenidad ante la adversidad.
Cinco claves de esta filosofía que pueden ayudarte a cultivar la calma en momentos difíciles son:
1. Diferenciación entre lo que podemos controlar y lo que no:
Los estoicos enseñan que debemos enfocar nuestra energía en lo que está bajo nuestro control (nuestras acciones, pensamientos y reacciones) y aceptar lo que no podemos cambiar (las acciones de los demás, el pasado, el futuro) .
Esta distinción nos ayuda a liberar la ansiedad y el sufrimiento que provienen de intentar controlar lo incontrolable.
2. Práctica de la visualización negativa:
Esta técnica consiste en imaginar las peores situaciones que podrían ocurrir. Al anticipar y reflexionar sobre posibles adversidades, nos preparamos mentalmente para enfrentarlas. Esto no solo reduce el miedo a lo desconocido, sino que también nos ayuda a apreciar más lo que tenemos en el presente.
3. Aceptación de la naturaleza de la vida:
Los estoicos creen que la vida está llena de altibajos y que la adversidad es una parte inevitable de la existencia. Aceptar esta realidad nos permite enfrentar los desafíos con una mentalidad más resiliente. En lugar de resistirnos a las dificultades, podemos verlas como oportunidades para crecer y aprender.
4. Cultivar de la virtud:
Para los estoicos, la verdadera felicidad se encuentra en vivir de acuerdo con la virtud. Esto implica actuar con sabiduría, justicia, coraje y moderación, independientemente de las circunstancias externas. Al centrarnos en ser la mejor versión de nosotros mismos, encontramos un sentido de propósito y serenidad que no depende de factores externos.
5. Reflexión y autoconocimiento:
La práctica de la reflexión diaria es fundamental en el estoicismo. Tomarse el tiempo para evaluar nuestras acciones, pensamientos y emociones nos ayuda a entender mejor nuestras reacciones ante la adversidad. El autoconocimiento nos permite identificar patrones de comportamiento que pueden ser perjudiciales y trabajar en ellos, promoviendo así una respuesta más serena y equilibrada ante los desafíos.
Estas claves del estoicismo pueden servir como herramientas prácticas ayudándonos a enfrentar la vida con mayor fortaleza y claridad mental.