Que no te importen eso kilos de más, ni tu color, ni tu talla.
Que no te importen las arrugas que acompañan los años, ni al color de tu pelo que vuela igual cuando el viento lo toca; ni el largo de tu falda, la que muchos miran y susurran, la que otros ignoran.
Que no te importe si alguien se cree superior a ti.
Que nadie te haga bajar la mirada, que nunca calles ante una injusticia.
Camina siempre de frente, con la cabeza bien alta, sin que te afecte lo que digan a tus espaldas, sin que te importen las miradas indiscretas, sin que sospechen lo que piensas, sin que sepan de tus luchas.
Nunca dejes de sonreír, ríe como si no hubiera un mañana, que importa si no entienden porque eres tan feliz, que se queden con las ganas.
Sé valiente y vive feliz.
La vida no espera a que pase la tormenta porque justo en medio de ella, la lluvia cae y limpia el camino.