Cocinar no tiene por qué ser complicado, incluso cuando estás comenzando en la cocina. Con unos pocos ingredientes básicos y algunos trucos sencillos, puedes preparar deliciosos platos en poco tiempo.
Una opción rápida y nutritiva. Solo necesitas huevos, espinacas frescas y un poco de sal y pimienta. Cocina las espinacas en una sartén con un toque de aceite, añade los huevos batidos y revuélvelos hasta que estén cocidos a tu gusto.
Perfecto para el desayuno o una merienda. Unta aguacate maduro en una rebanada de pan integral tostado y añade sal, pimienta, un chorrito de limón y opcionalmente, un huevo pochado o en rodajas.
Solo necesitas tomate enlatado, cebolla, ajo y caldo. Sofríe la cebolla y el ajo, añade el tomate y el caldo, cocina por unos minutos, licúa todo y listo. Puedes agregar crema o albahaca fresca para darle un toque especial.
Cocina la pasta de tu elección. Mientras se cocina, saltea ajo picado en aceite de oliva hasta que se dore. Mezcla la pasta con el ajo y aceite, añade sal, pimienta y queso parmesano rallado al gusto.
Ideal para un almuerzo rápido. Mezcla atún enlatado con lechuga, tomate, pepino y cebolla. Adereza con aceite de oliva, vinagre y sal. Puedes añadir garbanzos o aguacate para mayor sustancia.
Usa pollo ya cocido (puedes comprarlo ya preparado), agrega vegetales frescos como lechuga, zanahoria rallada y tomate, envuélvelo todo en una tortilla de trigo o maíz, y adereza con tu salsa favorita.
Estos platos no solo son rápidos de preparar, sino también saludables y fáciles de adaptar según lo que tengas en tu despensa. ¡Cocinar puede ser divertido y sencillo con estos consejos!
