Cuando se trata de hacer cambios en nuestra vida, solemos creer que estos requieren de grandes cantidades de acción que los acompañen. Sin embargo, a veces lo único que necesitamos es un pequeño empujón.

¡Hola, qué tal! Mi nombre es Maria  y te doy la bienvenida a una nueva edición de "Día Productivo" .En el post de hoy, vamos a hacer algo diferente. Desde hace unos días, comencé la lectura del libro *Un pequeño empujón*, un libro en el cual sus autores, uno de ellos un premio Nobel de Economía, nos enseñan que una de las claves para mejorar nuestra calidad de vida se encuentra en hacer cambios pequeños pero significativos.

Es por eso que, inspirado por esta lectura y en el hecho de que se acerca un nuevo año, hoy quiero compartirte 10 cambios o hábitos simples que puedes empezar a implementar hoy mismo. Estos hábitos te permitirán ser más productivo y mejorar tu salud y paz mental.

Ahora sí, sin más preámbulos, empecemos con el hábito simple número uno: **Define tus tres prioridades del día**. En uno de los cursos de productividad que tomé hace unos meses, me enseñaron este tip. Básicamente, consiste en que, al comenzar tu día, tomes tu celular y escribas en él las tres prioridades que tienes para ese día. Todos tenemos más de tres cosas por hacer, pero lo importante de este ejercicio es identificar cuáles son las tres tareas más importantes. Esto ayuda a evitar la tentación de abarcar muchas cosas a la vez, y te asegura que al final del día hayas avanzado en lo más importante. Te recomiendo usar la app "Things", que te permite poner solo las tres tareas más relevantes y, luego, a lo largo del día, ir marcando las que vas completando. Esto no significa que siempre vayas a completar las tres tareas, pero sí te ayudará a priorizar.

Hábito simple número dos: **Ten siempre un lápiz y papel a la mano**. Esto es útil cuando, mientras trabajas o estudias, te surge alguna idea o recordatorio que te distrae. En lugar de interrumpir tu actividad, solo anótalo. De esta manera, liberas tu mente de tratar de recordarlo y puedes volver a tu tarea principal sin perder la concentración. Luego, cuando tengas tiempo, podrás revisar y organizar esas ideas o pendientes.

Hábito simple número tres: **Usa un temporizador**. Esto es parte de la técnica Pomodoro. Puedes usar un temporizador de cocina o cualquier otro, y dividir tu trabajo en bloques de tiempo, como 25 minutos de enfoque seguidos de 5 minutos de descanso. Esto te ayuda a mantenerte concentrado y mejorar tus ciclos de trabajo. Con el tiempo, serás capaz de estimar cuánto tiempo te toma realizar ciertas tareas y planificar mejor.

Pasemos ahora a un grupo de hábitos que te ayudarán en temas de salud. Hábito simple número cuatro: **Siempre ten un vaso de agua a la mano**. Todos sabemos que tomar agua es bueno para la salud, pero tenerla cerca también ayuda a evitar el impulso de comer algo poco saludable. Tener agua disponible te facilita mantenerte hidratado y resistir los antojos.

Hábito simple número cinco: **Compra tus gustos al por menor**. Todos tenemos algo que nos gusta comer, aunque no sea lo más saludable. En mi caso personal, es el chocolate Sublime. Lo que te recomiendo es que lo compres de manera individual en lugar de comprar una caja grande, ya que tenerlo a mano te puede hacer comer más de lo que realmente deseas. Si lo compras al por menor, reduces la tentación y, además, controlas mejor tus gastos.

Ahora, pasemos a hábitos que realizo generalmente en la noche, que me ayudan a desconectar del trabajo y recargar energías para el día siguiente. Hábito simple número seis: **Dúchate después de trabajar**. Durante la pandemia, adopté el hábito de bañarme por la noche en lugar de antes de salir a trabajar. Esto me ayuda a recargar energías y a desconectar del trabajo. Te recomiendo probarlo si, al final del día, te sientes agotado y necesitas un impulso para cambiar de mentalidad.

Hábito simple número siete: **Registra tus gastos del día**. La administración de las finanzas puede ser complicada, pero registrar tus gastos diariamente te facilita el control. Así, cuando llegue el momento de hacer un balance o planificación, ya tendrás toda la información organizada. No tiene que ser complicado; puedes hacerlo en un Excel o en una app que prefieras.

Hábito simple número ocho: **Revisa tus correos al final del día**. Utiliza la técnica de "batching", que consiste en agrupar tareas similares y realizarlas en un solo bloque de tiempo. Revisa los correos que no son urgentes y respóndelos de una vez, sin interrumpir el resto de tus actividades durante el día.

Hábito simple número nueve: **Separa tus objetos por funciones**. Esto te ayudará a desconectar cuando lo necesites. Por ejemplo, usa tu celular solo para comunicación, tu laptop para trabajar y tu tablet para relajarte. Al hacer esto, evitarás que el trabajo se mezcle con tu tiempo personal y podrás mantener un buen equilibrio.

Y, por último, el hábito simple número diez: **Escribe un diario**. A partir de mayo de este año, he adoptado esta práctica que aprendí del libro *El camino del artista* de Julia Cameron. Aunque el libro está dirigido a artistas, escribir todos los días me ha ayudado a desahogarme y a liberar mi mente de preocupaciones. Si alguna vez sientes que tus pensamientos te distraen, escribir un par de párrafos puede ser una excelente manera de descargar esos pensamientos y continuar con tu día.

Y bueno, eso es todo por hoy. Ahora te invito a que me dejes en los comentarios cuáles son esos pequeños cambios que tú sientes que te han ayudado a ser más productivo. Estaré encantado de leerlos y creo que entre todos podremos aportarnos mucho valor para empezar el 2024 con toda la energía.