Bridgit Mendler se convirtió en una de las estrellas más prometedoras de Disney Channel en la década de 2010, gracias a su papel protagónico en la serie Good Luck Charlie. Su actuación como Teddy Duncan, una adolescente que enfrenta las complicaciones de la vida familiar, le ganó el cariño del público juvenil y la catapultó a la fama .
Mendler llegó a Disney Channel en 2010 con Good Luck Charlie, una comedia familiar que fue un éxito inmediato. Su personaje, una hermana mayor que documenta la vida de su familia para dejar un legado para su pequeña hermana, resonó con la audiencia por su cercanía y humor. Además de la serie, Bridgit también tuvo una exitosa carrera musical, con el lanzamiento de su álbum debut Hello My Name Is... en 2012, que incluyó el popular sencillo Ready or Not. Parecía tener todo lo que se necesita para convertirse en una estrella a largo plazo en el mundo del entretenimiento juvenil.
Sin embargo, después de la exitosa carrera inicial, las oportunidades para Bridgit Mendler comenzaron a disminuir, y muchos creen que el manejo de Disney jugó un papel crucial en la desaceleración de su carrera. A pesar de que Good Luck Charlie fue un éxito de audiencia, Disney no aprovechó el impulso para convertir a Mendler en una figura central en otros proyectos, como lo había hecho con otros talentos de la cadena, como Miley Cyrus o Selena Gomez. Mendler no recibió papeles destacados en nuevas producciones de Disney, y cuando la serie llegó a su fin en 2014, ella se quedó sin un proyecto grande en la compañía.
Aunque Mendler continuó trabajando en la música y la actuación, su carrera se desvió gradualmente hacia otros proyectos fuera del ámbito de Disney. En lugar de continuar con su imagen juvenil asociada a la cadena, comenzó a trabajar en proyectos más variados. Sin embargo, el cambio fue complicado. Por un lado, no pudo desprenderse por completo de su imagen de Disney, lo que limitó las oportunidades para roles más maduros. Por otro lado, las opciones fuera de Disney no lograron captar el mismo nivel de atención que sus proyectos previos.
Además, Mendler pasó mucho tiempo centrada en su educación y otras pasiones, lo que le dio menos tiempo para hacer carrera como actriz o cantante. Su álbum musical de 2016, Nemesis, no tuvo el mismo éxito comercial que su primer trabajo, y el público comenzó a olvidarse de su presencia en los medios.
Una de las principales razones por las que la carrera de Mendler no despegó de la manera en que muchos esperaban fue la falta de apoyo estratégico por parte de Disney. Mientras que otras estrellas del canal como Zendaya, Selena Gomez y Demi Lovato pudieron diversificar sus carreras con películas, música y otros proyectos fuera de Disney, Mendler no tuvo las mismas oportunidades para expandir su imagen.
A esto se le sumó la transición de Disney Channel hacia contenidos más orientados a un público adolescente, como las series de acción en vivo, dejando de lado proyectos familiares como Good Luck Charlie. Además, la competencia en la industria del entretenimiento también aumentó, con una nueva generación de jóvenes actores que tomaron el relevo en Disney.
A pesar de la falta de oportunidades en Disney, Bridgit Mendler ha logrado reinventarse. Se ha alejado del ojo público de la cultura pop juvenil y ha encontrado su lugar en proyectos más pequeños, como su aparición en la serie Undateable y su participación en diversos proyectos de voz y doblaje. Además, su faceta académica también ha sido importante: Mendler obtuvo un título en antropología de la Universidad de Harvard, lo que le permitió explorar nuevas perspectivas fuera del mundo del entretenimiento.
El caso de Bridgit Mendler es un ejemplo claro de cómo las decisiones empresariales y la falta de apoyo pueden afectar la carrera de una joven estrella. A pesar de su talento y popularidad en Disney, la falta de oportunidades para evolucionar dentro de la compañía contribuyó al estancamiento de su carrera en la industria del entretenimiento juvenil. Sin embargo, Mendler ha demostrado ser más que una estrella de Disney, explorando nuevos horizontes y creando un camino diferente para su vida profesional. Aunque su carrera en Disney no fue todo lo que muchos esperaban, su resiliencia y capacidad de adaptación han sido claves para su evolución como persona y artista.