La puerta que nunca debí abrir
Hace 4 días
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Cuando me mudé a este pequeño pueblo, no esperaba mucho. Solo buscaba paz, un escape de las luces de la ciudad .
Pero en la casa que renté había algo… diferente. Los vecinos la llamaban "La Casa de los Ecos". Decían que, en ciertas noches, se escuchaban susurros que no venían de ningún lugar lógico. Pero yo no creía en esas cosas. Hasta anoche.

Había pasado un día tranquilo; los pájaros cantaban, el sol entraba a través de las ventanas. Pero cuando cayó la noche, un frío inexplicable se apoderó de la casa. Me puse un suéter y me reí de mi propia paranoia. "Es solo una casa vieja", me dije. Entonces, lo escuché.

Un golpeteo. Suave, rítmico. Venía de abajo.

Seguí el sonido, pensando que sería una tubería o algún animal atrapado. Pero el golpeteo me llevó hasta una pequeña puerta en el suelo, oculta bajo una alfombra vieja en la sala. Nunca la había visto antes. La puerta parecía tan antigua que el metal del picaporte estaba oxidado.

Algo en mi interior me decía que no debía abrirla. Pero la curiosidad me venció.

Cuando levanté la trampilla, un olor a humedad y tierra me golpeó. Había una escalera que descendía al vacío, y el golpeteo era más fuerte ahora, como si viniera de las profundidades. Agarré una linterna y bajé, cada peldaño chillaba como si gritara "¡No lo hagas!".

Llegué al fondo. Un pasillo de piedra se extendía frente a mí, y al final había algo… algo que nunca debí haber visto.

(Continuará…)

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Ismaray GM 50 puntos Hace 4 días Ismaray GM 50 puntos
Eso no se hace?
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Hace 4 días
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