Hoy es un día especial, lleno de luz, tradición y unión. El Día de las Velitas no es solo una costumbre, es un momento para detenernos, encender una vela y dejar que su llama ilumine nuestros deseos, recuerdos y agradecimientos.
Es el inicio de la Navidad, un tiempo para compartir en familia, reflexionar sobre lo vivido y llenarnos de esperanza por lo que viene .Mientras colocamos las velas en las calles, balcones o ventanas, sentimos que algo mágico ocurre: las luces conectan corazones y despiertan esa calidez que solo esta época puede traer.
Este día me recuerda la importancia de los pequeños momentos, esos que, aunque sencillos, son los que realmente nos llenan de alegría. Así que hoy, al encender una vela, cierro los ojos y pido por paz, salud y felicidad para todos.
Que este Día de las Velitas sea una oportunidad para reconectar, para agradecer y para dejar que la luz nos guíe hacia lo mejor. ¡Feliz Día de las Velitas!