¿Algún día se sabrá lo que en realidad sucedió?
En 1959, nueve excursionistas rusos murieron en circunstancias inexplicables en los Montes Urales. Sus cuerpos mostraban lesiones extrañas y las explicaciones van desde avalanchas hasta fenómenos paranormales.
Este asesino en serie operó en California durante los años 60 y 70, enviando cartas cifradas a la policía .Aunque algunos de sus mensajes han sido descifrados, su identidad nunca se confirmó.
En 1590, una colonia inglesa en América del Norte desapareció sin dejar rastro. Tan solo quedó un mensaje tallado en un poste, la palabra “Croatoan”. Hasta hoy, no se sabe qué ocurrió con los colonos.
Fran Laviada