HABLAME!

Cuando mi corazón se aparte de tu lado, cuando no tenga motivos para estar en este camino, cuando ya no quiera ir en busca de las personas que se encuentren en las mismas situaciones como las que en alguna vez yo me encontré, cuando comience a dejar atrás mi primer amor, cuando ya no te busqué, cuando ya no tenga ganas de cantarte, o incluso cuando ya no tenga ganas de hablarte. HABLAME

Cuando notes que me empiezo abandonar en los quehaceres de la vida, o incluso comienzo a renunciar de estar en tu presencia por querer estar en otros lados .HABLAME.

Cuando me escuches decir que por mis propios medios he logrado mis sueños, o que por mis capacidades he conseguido tal trabajo o cuando ya no agradezca cuando esté ganando un concurso.

¡HABLAME!

Y renueva este corazón para que en medio de las tristezas pueda volver a estar de pie en ese camino, para que en medio de las batallas aprenda a vivir, hablame Padre y toma mi mano, quiero caminar a tu lado.

¡Ayudame! ¡Fortaléceme! Quiero seguir en este caminar, quiero que tú sigas siendo mi primer amor, quiero que mi corazón siga latiendo cada que estoy en tu presencia, quiero que mi primer agradecimiento siempre sea para ti, y que a pesar de todas las batallas que tenga que enfrentar al final de ellas siempre sean estando de pie y que aunque la lucha se vea cada vez más grande pueda seguir reconociendo que en esa batalla tú eres el único que está luchando conmigo.

Hablame Señor, y sigue luchando conmigo, no permitas que me suelte de tu mano, sana este corazón… fortalece este espíritu que nadie me aparte de este primer amor, no permitas que me aparten de tu amor.

¡HABLAME!

Y… Entonces la joven con lágrimas en los ojos, se puso de pie porque tuvo la confianza de que Dios, el Dios del que ella habla para que los demás lo conozcan estaba a su lado y Él le iba hablar, Él la iba a fortalecer. Esa tarde la joven soñó, esa noche la joven quedó renovada.
Dios le habló.