200 g de chocolate negro o chocolate de repostería (puedes usar chocolate con leche si prefieres un sabor más suave)
100 g de mantequilla
150 g de azúcar (puedes usar un poco menos si prefieres menos dulce)
2 huevos
1 cucharadita de esencia de vainilla
100 g de harina
1 pizca de sal
1/2 cucharadita de polvo de hornear (opcional para mayor esponjosidad)
Nueces o trozos de chocolate (opcional para agregar textura)
Instrucciones:
Derretir el chocolate y la mantequilla:
En un bol apto para microondas, derrite el chocolate junto con la mantequilla en intervalos de 30 segundos, removiendo cada vez. También puedes hacerlo al baño maría .
Deja que se enfríe un poco.
Mezclar los ingredientes húmedos:
En otro recipiente, bate los huevos con el azúcar y la esencia de vainilla hasta que la mezcla esté suave y cremosa.
Unir todo:
Agrega la mezcla de chocolate derretido a los huevos batidos y mezcla bien. Luego, incorpora la harina tamizada, la sal y el polvo de hornear (si decides usarlo). Si te gustan los brownies con trozos, es el momento de añadir las nueces o más chocolate picado.
Hornear:
Vierte la mezcla en un molde rectangular engrasado o forrado con papel pergamino. Hornea a 180°C (350°F) durante 20-25 minutos. El centro debe quedar un poco húmedo, pero no líquido. Puedes hacer la prueba del palillo: si sale con algunas migas pegadas, está perfecto.
Dejar enfriar y cortar:
Deja enfriar el brownie en el molde antes de cortarlo en cuadraditos. Esto permite que se asiente bien y sea más fácil de cortar.