Gracias por hacerme creer valer menos.
Gracias por ser cruel.
Gracias por serme infiel.
Gracias por todas las peleas.
Gracias por humillarme.
Gracias por no importarte.
Gracias por faltarme al respeto.
Gracias por jugar conmigo.
Gracias por no quererme.
Gracias por no amarme.
Gracias por los prejuicios.
Gracias por juzgarme.
Gracias por no atenderme.
Gracias por demostrarme que soy humana, que lloro, que me duelen las cosas, que así mismo soy capaz de reír aún con lágrimas de dolor. Gracias por demostrarme que no vales la pena .
Y GRACIAS por recordarme lo que valgo, lo que soy y lo que merezco, porque nada de lo que has hecho será en vano, pues como enseñanza me ha quedado.