Sabías que el kintsugi (a veces escrito kintsukuroi) es una técnica artesanal japonesa que se utiliza para reparar objetos de cerámica rotos. La palabra kintsugi significa unión con oro en japonés, ya que consiste en pegar las piezas rotas y luego resaltar las grietas o fracturas con polvo de oro, plata o platino .
En lugar de esconder las imperfecciones, esta técnica las celebra, creando un objeto nuevo y único con una belleza diferente.
El kintsugi se basa en una filosofía estética y espiritual que valora la historia de los objetos y la belleza de la imperfección. Es una forma de ver la rotura y la reparación como parte de la vida del objeto, donde las cicatrices son muestra de resiliencia y valor. Esta práctica está muy vinculada a la estética del *wabi-sabi*, que se centra en apreciar lo efímero, imperfecto e incompleto. En ese sentido, el kintsugi se usa como una metáfora sobre la resiliencia humana: nuestras cicatrices y experiencias no nos debilitan, sino que nos hacen únicos y fuertes.