Bernie Madoff fue un prominente inversor y ex presidente de la Bolsa de Nueva York que orquestó una de las estafas más grandes de la historia. Su firma, Bernard L .
A medida que su firma creció, Madoff ofreció a los inversores rendimientos inusualmente altos y consistentes, lo que atrajo tanto a pequeños ahorradores como a grandes instituciones. Sin embargo, en realidad, Madoff estaba operando un esquema Ponzi. Utilizaba el dinero de nuevos inversores para pagar a los anteriores, en lugar de generar ganancias reales. Esta estrategia le permitió mantener la apariencia de un negocio próspero.
Durante décadas, Madoff engañó a miles de personas, incluyendo amigos, familiares y figuras influyentes. Su estafa se mantuvo oculta gracias a su credibilidad y al secreto que rodeaba sus operaciones. Sin embargo, en 2008, la crisis financiera llevó a un aumento en las solicitudes de retiro. Madoff se vio incapaz de cubrir las demandas, lo que comenzó a desvelar la verdad.
El 10 de diciembre de 2008, Madoff confesó a sus hijos que su negocio era un fraude. Al día siguiente, fue arrestado por el FBI. En marzo de 2009, fue acusado de fraude, blanqueo de dinero y perjurio. En junio de ese mismo año, se declaró culpable y fue condenado a 150 años de prisión.
La estafa de Madoff afectó a aproximadamente 65,000 inversores y se estima que las pérdidas totales alcanzaron los 65 mil millones de dólares en promesas de inversión. Después de su arresto, se inició un esfuerzo por recuperar los fondos perdidos, liderado por el síndico Irving Picard, quien ha recuperado miles de millones a través de demandas y liquidaciones.