El ejemplo personal del entrenador juega un papel crucial en el desarrollo de sus jugadores, especialmente en las categorías de base con niños, adolescentes y jóvenes que ven en su entrenador un modelo a seguir
Coherencia entre palabras y acciones: No se trata solo de dar instrucciones, sino de encarnar los valores y hábitos que se quieren transmitir. Un entrenador que predica la importancia del esfuerzo y la alimentación saludable, pero no los practica en su propia vida, pierde credibilidad y dificulta que sus jugadores lo tomen en serio.
Motivación e inspiración: Un entrenador en buena forma física, que participa activamente en los entrenamientos y demuestra pasión por el deporte, inspira a sus jugadores a esforzarse y mejorar .Ver al entrenador correr, realizar ejercicios y mantener una actitud positiva contagia entusiasmo y crea un ambiente de trabajo más efectivo.
Respeto y confianza: Cuando los jugadores perciben que su entrenador se cuida, se esfuerza y es coherente con sus enseñanzas, le otorgan mayor respeto y confianza. Esto facilita la comunicación, la disciplina y la receptividad a las indicaciones del entrenador.
Se puede utilizar ejemplos muy claros de otras profesiones para ilustrar la importancia de la coherencia entre la teoría y la práctica. Así como un médico que fuma delante de un paciente, por poner un ejemplo, no inspira confianza, un entrenador que no cuida su salud y su forma física envía un mensaje contradictorio a sus jugadores.
Si bien la preparación técnica y táctica es fundamental, el aspecto personal y el ejemplo del entrenador son igualmente importantes para el desarrollo integral de los jugadores, sobre todo en las etapas formativas.
Paco Arias. Entrenador Nacional