1-El déficit fiscal como origen de los problemas: Javier Milei identifica el déficit fiscal como el principal causante de la crisis económica de Argentina. A lo largo de su historia, el país ha mantenido un gasto público muy superior a sus ingresos, lo que ha generado una dependencia crónica del endeudamiento externo .El sobreendeudamiento, a su vez, lleva a la insolvencia, creando incertidumbre en los mercados y desincentivando la inversión. Esta falta de inversión genera fuga de capitales, lo que agrava aún más la situación económica. Para Milei, la inflación es una consecuencia directa de esta emisión descontrolada de dinero que el Estado utiliza para financiar su déficit. Además, considera que las políticas de control de precios y regulaciones agravan la situación, ya que destruyen la capacidad productiva del país y generan más pobreza. En resumen, el déficit fiscal es el "huevo de la serpiente" que origina los problemas estructurales de la economía argentina.
2-Equilibrio presupuestario como meta: Milei propone una estricta regla de equilibrio presupuestario para corregir este problema. La propuesta implica que los presupuestos del país deben elaborarse con un superávit primario, es decir, antes de considerar el pago de los intereses de la deuda. Esto significa que los gastos deben ajustarse de acuerdo con los ingresos disponibles. A diferencia de los modelos anteriores, donde se decidía primero cuánto gastar y luego cómo financiarlo, Milei propone que primero se determine cuántos recursos fiscales se van a recaudar y, con base en eso, se establezcan los gastos. Esto asegura que no haya necesidad de recurrir a la emisión monetaria descontrolada o al endeudamiento para cubrir el déficit.
3-Recortes de gasto en caso de déficit: La propuesta de Milei incluye una política de ajuste automático del gasto público en caso de que los ingresos sean inferiores a lo proyectado. Si el crecimiento económico no es suficiente y los ingresos caen por debajo de lo previsto, el gasto público se reducirá automáticamente para garantizar el equilibrio presupuestario. Este enfoque es radicalmente distinto al aplicado en muchas economías, donde es el sector privado el que sufre los ajustes cuando la economía está en crisis. Milei plantea que, en su modelo, será el Estado quien absorberá los efectos negativos de las fluctuaciones económicas, a través de recortes en el gasto discrecional y en otros rubros del gasto público.
4-Uso del superávit y reducción de impuestos: En caso de que los ingresos fiscales superen las expectativas y se genere un superávit mayor al previsto, Milei propone dos vías de acción, dependiendo de la naturaleza del aumento. Si se trata de un aumento temporal o extraordinario, el superávit se destinaría a reducir la deuda pública o la oferta monetaria, lo que a su vez ayudaría a bajar la inflación. Si el aumento de los ingresos es estructural y permanente, Milei propone que los excedentes sean utilizados para bajar los impuestos. La idea es devolver esos recursos adicionales a los ciudadanos, reduciendo la carga impositiva, lo que incentivaría el consumo y la inversión privada, fortaleciendo así el crecimiento económico a largo plazo.
5-Blindar el equilibrio presupuestario: Finalmente, Milei plantea que su propuesta busca blindar el equilibrio presupuestario de forma permanente. La idea es que, independientemente de la situación macroeconómica, el Estado mantenga un balance fiscal sin recurrir al aumento de impuestos o la emisión de moneda. Esto se lograría a través de recortes de gasto en el sector público, garantizando que el Estado no siga absorbiendo más recursos de los que puede generar. Este enfoque está diseñado para terminar con el déficit fiscal de una vez por todas, reducir el gasto público de manera significativa, y devolverle a los argentinos "el fruto de su trabajo" a través de impuestos más bajos. Para Milei, solo reduciendo el gasto público y eliminando los impuestos innecesarios se puede generar una economía libre y próspera en Argentina.