!!!Gotica culona y ninfómana!!!Verdadera pasión sexual!!
16 Mar, 2024
Tiempo de lectura aprox. :
4 min.
0 votos

Me encontraba navegando en Instagram, matando el tiempo, viendo reels y esas cosas inservibles que la redes sociales inexorablemente te obliga a consumir y decidí ver las historias de amigos y conocidos. Generalmente, cuando estoy en Instagram solo consumo basura; como no soy muy activo de esas cosas, ni tampoco soy mucho de compartir lo que hago, me privo de ver las historias de los demás para evitar verme como un “psicópata” .

Tengo claro que eso es una exageración, pero me paso me paso esos rollos por mi cabeza.


 


Veía historias, deslizaba el dedo perfil tras perfil, y como de costumbre, pura mierda; cabezas calientes opinando de política, drogas, fiestas, alcohol, memes, videos graciosos (o esa es la intención).


 


Hasta que llegué a las historias de Fernanda. Una chica con la tuvimos una relación sexo afectiva desde hace algunos años. Tengo lindos recuerdos de ella y viceversa porque le quité la virginidad cuando ella todavía era una liceana. En ese tiempo yo era un universitario y reconozco que me iba muy bien con las chicas. Pololeaba y ella fue mi amante durante algún tiempo. Eso la marcó. Cuando la conocí en la micro, ella era una chica muy depresiva y con una autoestima por el suelo. No tenía amigas y se burlaban de ella por su peso. Pues sí, es gorda, pero nada exagerado, puesto que sus curvas hicieron que me llamase la atención. Aunque en realidad, fue ella la que se me acercó primero elogiando mi “estilo”. Pero en realidad eso no importa. No importa nada en absoluto.


 


Lo cierto es que Fernanda después de nuestra caótica relación es una mujer más empoderada en relación a su auto apreciación. Sigue siendo una mujer gorda pero rica. Una gordibuena. Le gusta mostrarse en tiktok e Instagram. Casi todos los días sube fotos en lencería que si toman de sorpresa, acostado en la soledad de mi departamento, las termino en una paja recordando aquellos tiempos en que por medio del sexo se fue autoafirmando como una mujer sexy. Yo siempre se lo dije. “Erí toda rica, que nadie te diga lo contrario”.


 


Vi sus historias y por supuesto me calenté; foto en el espejo, poca ropa, un sostén que dejaba ver una diminuta parte de su oscuro pezón, mucho muslo y mucho maquillaje. No reaccioné. Pasé a la siguiente; su rostro y ella cantando una mierda emo que le encanta. Y la siguiente; de nuevo, foto en el espejo en un conciso boomerang de su prominente culo en el que literalmente hice de todo. Fue la gota que rebalsó el vaso. Era imposible no reaccionar. Le escribí:


 


- Lo echo de menos.


 


Pasó una media hora y ella reaccionó a mi mensaje con un simple:


 


- Y tú?


 


Le remarqué mi propio mensaje con otra carita triste. Esperé y esperé lo suficiente hasta que se hizo muy tarde y me dormí. Amurrado, pensando que mi sorpresiva aparición no le hizo gracia (ella tiene un carácter muy fuerte) y simplemente me ignoró. Más que mal, desde bien terminada la pandemia fue la última vez que estuvimos juntos y nuestra relación (nunca oficial) se daba siempre por temporada. Nos volvíamos a topar, teníamos sexo, así durante algún tiempo y luego la ignoraba, ya que salía con otra o me ponía a pololear. En ese sentido siempre he sido un hijo de puta con ella. Me aprovechaba sabiendo que siempre fui su prioridad y su primera vez en todo.


 


Al otro día me levanté y fui al trabajo. Lo de siempre, gestionando reuniones, salidas a terreno de mis jefas, y tratando de truncar alguna que otra mierda que desprenda el más mínimo hedor de corrupción. Ser un burócrata en mi país no es más que ver en primera plana cómo se derrocha el dinero público. Una mierda, pero es así. Hasta que me llega un mensaje de Fernanda. De reojo veo mi celular:


 


- Me extrañas a mí o a mi culo

716 visitas
Valora la calidad de esta publicación
0 votos

Por favor, entra o regístrate para responder a esta publicación.

Publicaciones relacionadas
Adimvi es mejor en su app para Android e IOS.