Dice la leyenda, que en la playa de Vigo (Galicia España), en torno a las horas del atardecer, aparece una mujer con un lienzo y un caballete debajo del brazo. Antaño se creía que esta mujer aparecía por que alguien la había visto, y, de hecho un tiempo fue así .

Así, uno de los de mi orden, me mandó ir a investigar la zona, y a poner y esclarecer este asunto. Pero antes me presentaré. 

William Gerfor. Y represento a una orden que lucha en la clandestinidad y contra lo ocultismo. Ya saben damas y caballeros, brujería..

¿Se puede considerar a una mujer en la playa pintando, brujería?. Por supuesto!!.

Hemos de tener en cuenta, que esa "mujer", aparece y desaparece. No tenemos informes de que haya o haya habido ataques algunos a la población. Lo que hace pensar que pueda tratarse de un mero hecho de superstición.

Hace dos días, bajé a la playa. Lo que sucedio es digno de contar.

Me interné en la playa y al principio no vi nada. Cuanto más me internaba en la playa, con más frecuencia empecé a escuchar ruidos y sonidos guturales.

Al llegar a un recoveco muy cercado por las holas del mar, me encontre a una mujer tumbada en la arena. Dudé de si era la mujer que estaba buscando. Pues esta, no parecía estar pintando. Todo lo contrario se estaba acicalando el pelo con un erizo de mar.

Entonces, pensé en que se podría tratar de otro ser, o ser facilmente una mujer corriente.

Que equivocado estuve. La mujer, no me prestaba atención al principio, sino que cantaba una canción en un tono lento y  parecía que lo entonaba al ritmo de las olas del mar. Al acercarme, lo comprendi...

No era una mujer!!, era una mariña!!.

Y si hay una mariña en la costa de Vigo, también puede haber mariños!!. La criatura medio mujer y pez, giró entonces su cabeza y me enfocó con su mirada. Empezó a cambiar el tono de voz, y a cantar mucho más rapido y energicamente.

Las olas se embravecieron, y empezaron a emerger decenas y decenas de mariños!!.

No sabía que hacer, y no había ni rastro de la mujer pintora.

Empecé a correr por la playa, por suerte los mariños son lentos en tierra firme. En cuanto a la mariña, eché un vistazo atrás, y vi que sacaba un arpa con algas. Empezó a tocarla. Y entonces sentí como algo me relentizaba, y a los mariños les hacía más fuertes y rápidos!!.

Escapé de milagro, pero, he de volver alguna vez, pues esta conyuntura blasfema, hay que eliminarla de la costa. Juro que lo haré, pero, dejeme decirle una cosa. Si viaja a Galicia, y se encuentra con uno de estos seres, tenga cuidado!!.

Pues las mariñas son encantadoras, pero, los mariños, son unos hijos de Lucifer!!.

Atentamente William Gerfor, último druida de Inglaterra..