“¡Respeto tu privacidad tocando la puerta, pero reafirmo mi autoridad como padre entrando de todos modos!”
Esta es la frase que comienza este escrito y que, hace no mucho escuché y analicé para transmitir ciertas ideas contrapuestas las unas a las otras porque es cierto que por una parte un padre/madre pueda hacer eso y por otra parte no.
Por el lado del primer momento, un progenitor debe de tener run respeto hacia su hijo/a en el concepto de respetar y, a la vez, enseñar que una persona, por ser persona, debe de recibir un respeto de los demás.
También debe de tener un concepto de privacidad que debes de ser vulnerado.Sin embargo, a este caso se le puede aplicar un niño muy travieso o un niño con muy malas ideas que, en definitiva, tiene malicia y es malo.
Primero que todo, este padre que desee ( y como en parte tiene el derecho de poder interrumpir a hijo/a ) vulnerar la privacidad, tiene que tener una sospecha previa para tal acto porque sino si que entramos de lleno en el dilema, es decir, en el punto de si es abusivo o no este actuar por parte de los padres.
Conclusión, un padre, desgraciadamente para algunos casos, puede hacer lo que quiera con sus hijos ( hasta que le llevan preso ), pero debe atenerse a tener unas pruebas. Además, este acto no es tan agresivo en edades infantiles donde un menor debe tener cierta vigilancia y con esta acción se pueden prevenir daños .Otro caso muy distinto es con un hijo/a ya adulto, donde puede el ascendiente en cierto modo tiene el “derecho” de invadir con la intención de ayudar.....
Pero ya no es de respetar su privacidad sino el hecho de la madurez y adultez de una persona.
Gracias y hasta pronto.