Como ya mencioné en este anterior post, esta publicación va dirigida, como una especie de respuesta, hacia la usuaria ‘Jenzu04’ que me ha permitido escribir acerca del tema y me ha ayudado a desarrollar este nuevo tema para el perfil.
Ella describe la infidelidad como una pauta dentro de un ser humano que se desarrolla desde el cerebro y la imaginación hasta lo que vendría ya la terminación de una acción sexual con una persona diferente a tu pareja actual.
Por una parte, el hecho de pensarlo en tu mente pudiera ser cierto que se define como una infidelidad o como un intento de, ya que imaginar situaciones con esa otra persona pudiera ser, pero ¿qué pasa si introducimos en el tema.... el porno?
En el caso del porno ya no te lo estás imaginando, sino que lo estás viendo en el móvil, ordenador o Tablet y, a su vez, empiezas a satisfacerte a ti mismo mediante ese material pornográfico.
Breve inciso y añadido, en este punto, estando en una relación con una persona, esa misma persona puede mandarte contenido subido de tono de ella misma, es decir, un poco de sexting, aunque eso surge de forma más espontánea .Con lo que se podría cubrir el tema digamos del porno.
Sin embargo, hablando desde la experiencia de usuario y consumidor, en ocasiones sin quererlo ( dado que la excitación no la puedes controlar; puedes controlar tus actos, pero la excitación no y eso es un punto de más adelante ) surgen otros gustos momentáneos que se pueden suplir con el porno.
No me refiero solo a características físicas como por ejemplo que te apetezcan persona rubias o altas, sino, también a acciones concretas como las distintas categorías de vídeos porno que hay en las redes.
Todo esto se puede, o al menos la gran mayoría de cosas ( menos la altura y cosas así genéticas ), paliar dentro de la misma relación, es decir, si son cosas que se pueden hacer de a dos, se hacen en la pareja y se zanja el asunto.
No obstante, me surge la duda de qué pasaría si hubiera una tercera persona dentro de la misma acción sexual, concretamente, si el deseo de una de las dos partes es hacer un trío sexual. Pues, sería una situación que cada pareja debería de solucionar como pudiese y creo es otro tema un poco alejado.
Llegados a esta parte del tema, introduzco el hecho de la pareja que esté muy lejos o que la rutina de unos novios sea solo poder verse una vez a la semana o solo poder tener un acto sexual una vez a la semana ( que, por una parte, acumula las ganas ).
Y NO, no estoy introduciendo esto como el elemento clave y diferenciador para engañar a tu pareja, como una excusa para engañar a tu pareja porque no es ese el mensaje.
Lo añado con la intención de dar una mejor imagen a lo que sería el desenfreno de uno mismo, con la masturbación, mediante el material pornográfico de tu pareja o de una página de contenido para adultos. Repito que, como consumidor y hacedor de estas prácticas, observo esta situación como un mero acto de satisfacción para uno mismo.
Conclusión, el hecho de pensar en otra persona sexualmente sin actuar o considero que sea una parte de la infidelidad porque, como señalé antes, la excitación es algo que no se controla, pero depende de uno mismo lo que haces con esa sensación y del respeto hacia a tu pareja o de los sentimientos de la misma. Con el acto de ver porno, es lo mismo y es, en primera instancia, una forma de satisfacer un deseo que, el momento dado, tu pareja no puede satisfacer, pero no porque no sea capaz sino por otras circunstancias de la situación.
Gracias y hasta pronto.