Son las 3:16 de un viernes noche.Miro por la ventanay el cielo está teñido de un naranja fuego.Ya van 70 noches de soledad;y aunque ya no quiero, ahí está.La cabeza se me llena más delrecuerdo de su cuerpo desnudoque de sus reproches.Y no porque fueran pocos,yo creo que es porque esta vezviví un amor tan intensocomo inestable.Fracaso.Ha sido un fracaso.Porque aunque nos quisimossiendo dos jodidos polos opuestosy nos juramos amor eterno,creo que siempre hubo cierta mentiraen aquellos ojos que me repetían,intentando autoengañarse,que podían ser más tolerantes;pero nunca lo fueron.Ella fue intensa,alocada,frágil,generosa,impulsiva,pero nunca
nunca fue tan tolerantecomo para soportarmeel resto de su vida.